sin título aún

foto por: luciérnaga

Añoranzas de europas
inventadas, lejanas.
Spaghetti ahorcado
en nueces trituradas,
óleos lubricantes,
cogollos verdes con
profundo olor a
menta salada.

Ausencia de gnomos
asilados en tierras garas.
Disfraz desahuciado
con caricias pisadas,
bostezos acurrucados,
cromos en espiral,
sudores eclipsados
y saliva contenida.

Soledad de caracol
en atardecer rosa.
Palosanto opacado
en maullidos íntimos,
aguas que van y vuelven,
mirlos trovadores,
cordeles muertos de frío,
distracciones cotidianas.
¡Cómo te hacés extrañar!
Perdón por no dejarte ir,
después de tu partida.

duerme

foto jocha de: David Guzmán

Duerme, duerme tranquila
Con la paz del silencio a la madrugada
A pesar de estar rodeada de gente.
Duerme, su respirar es profundo
Sus ojos se mantienen yertos, inmóviles
Sus miembros están y no,
Al fin y al cabo no los necesita allí.

Duerme y sonríe porque sueña,
Sueña en ese mundo real,
Sin muerte, sin dolor o agonía.
Sueña que la abraza, la besa y
La roza con sus manos.
Sueña con su voz, con su aroma,
Con su color y la siente.

La abraza nuevamente y ríe
Al verla, tenerla y mirarla a su lado.
Al ver sus cabellos, su mirar profundo,
Su sonrisa oculta en su cáscara bien conocida
De seriedad, pero viva.

Viva con tantos sueños, planes, tropiezos
Caminos por hacer y deshacer,
Por tantas otras vidas con las que cruzarse.
Con tanto, tanto y a la vez tan pocos años vividos.

Y duerme, duerme hasta no sé qué
Maldito ruido, la devuelve a ese estado de vigilia.
Para volver a abrir los ojos, usar sus miembros,
Acelerar su pulso e iniciar las lágrimas,
Ante un cruel abrazo que, intentando consuelo,
Solo la deposita frente al ataúd de su
Hija muerta, en día de navidad rodeada de gente,
Tanta / pero que aún no es suficiente para resucitarla.

quito nocturno

foto por luciérnaga

quito nocturno,

luciérnagas inmóviles,

orquesta disforme,

silencios de pingullo.

Néctar de suelas gastadas

bajo colcha estelar.

Opacada por neones

y dicroicos,

duermes amamantando

a tus seres sonámbulos

con los pechos de nana

de una vieja montaña.