lunes, 30 de junio de 2008

Hambrunas...

Respiran las calles

De la ciudad-ombligo,

Las carencias cotidianas,

La indigencia rechazada,

Su inequidad mojigata.

Exclusión que torna en

Decepción, en urgencia

De llenar la realidad de

Sentido, en hambruna

De volver a gozar las

Pequeñas cosas.

De comerse el mundo…

¿Y a qué sabe?

A helado de uvilla casera

Con lágrimas de mar,

A calor de colchón,

Memorias de álbum familiar,

A luna negra rasguñada por la brisa,

A soledad otoñal,

A vísceras enamoradas,

A jaula de hadas.

A flor amarilla

En manitos sucias,

A smog de rutina,

Filosofías de viejo

Perdido en alcohol.

¡Viva la inentendible realidad!

¡Muera la cauta racionalidad!

Muero de ganas de…

Mejor vivo de ganas

De comerte en este mundo.

1 comentario:

Andrea Yépez dijo...

Sale la noche de sus rincones solitarios, ante mis ojos se repite la historia, rondando las calles, con la mirada fija a la vida, descubro dos costados, dos lados, dos caras, espíritus marginados que se refugian en arcaicos cartones, y costosas risas hipócritas que seducen a sonrisas consumidas, ¿será esta la verdadera esencia de las sociedades urbanas?...me sobrecoge el silencio y en la naturaleza íntima, que rodea la existencia, mi respuesta continúa inconclusa, pendiente e irresuelta.
eso mi querida Gio, son Hambrunas Morales....Felicitaciones por el Blog....!!!!!